Sexo de noche, ¿por qué lo prefieren los noctámbulos?

Hay gente que siempre tiene ganas de disfrutar de un poco de placer sexual, sea la hora que sea. Otros prefieren despertarse con ganas de pasarlo en grande en la cama y que lo primero del día sea un buen polvo que les ponga las pilas para el resto del día. Y luego también están los que prefieren hacerlo por la noche, tal vez por ser lo más habitual, tal vez por ser el momento en el que es más fácil coincidir con nuestras parejas, pero también tiene sus contras.

Y es que por la noche podemos estar tremendamente cansados y no estar a la altura de lo que querríamos a la hora de disfrutar. Esto nos afectará a nuestro rendimiento, por supuesto. Eso no quita que también pueda ser un buen momento para hacerlo, porque por supuesto lo es, como lo hemos ido comprobando durante muchísimos años. La noche, la intimidad, el momento de sosiego y paz, puede darnos ese ambiente especial para terminar el día por todo lo alto.

Las mujeres prefieren las noches y los hombres las mañanas

Según algunos estudios, parece que las mujeres son las que más apetencia sexual tienen por la noche. Disfrutan más del sexo a última hora del día, tal vez por la necesidad de terminar la jornada dejándose llevar. Por el contrario, parece que la mayoría de hombres prefieren disfrutar del placer por las mañanas, recién despiertos, y es que muchos ya se levantan con todo aquello bien duro, y hay que aprovechar. Esto, por supuesto, es una generalización, porque también habrá muchas mujeres que prefieran hacerlo de día y hombres a los que les guste más entregarse por la noche. Sin embargo, enmarca muy bien las preferencias de cada género.

¿Cuál es la mejor hora para tener sexo?

Esto sorprenderá a muchos, pero según los últimos estudios realizados, parece que las mejores horas para tener sexo son a primera hora de la mañana y a media tarde, sobre las cuatro o cinco, ya que es cuando nuestro cuerpo alcanza su mayor nivel hormonal. Esto dependerá de cada uno, por supuesto, pero la ciencia parece apuntar hacía ahí, dando la razón a los que piensan que un  polvo mañanero es mucho mejor que uno al final del día. Todo dependerá de cómo logremos adaptar horarios, del tiempo que pasemos junto a nuestra pareja y demás, pero el fin de semana puede ser un momento perfecto para probar nuevos horarios y quedarnos con el que más nos convenza.

¿Cómo motivar el sexo nocturno?

Como decíamos al principio, muchas personas no sienten demasiado deseo al final del día por estar demasiado cansados después de toda la jornada de trabajo, de cuidar la casa, los niños si se tienen, etc… Sin embargo, es bueno motivar en cierta manera un rato de placer conjunto a esas últimas horas del día, sobre todo si es el tiempo que pasamos junto a nuestra pareja y queremos aprovecharlo de verdad. Podemos motivarnos con pequeñas notitas o mensajes a lo largo de todo el día, que culminen finalmente con el acto en la cama, o también creando un buen ambiente, con una cena especial, velas, un buen baño… Lo importante es que tengamos ganas de dejar atrás el cansancio y dejarnos llevar por la pasión.

¿Qué es el sexsomnio y cómo funciona?

Dentro de las parasomnias o trastornos del sueño hay una que llama mucho la atención, el sexsomnio, que viene a ser el trastorno por el cual una persona puede mantener relaciones sexuales estando dormida, y luego, al despertar, no recordar absolutamente nada. Es una especie de sonambulismo sexual que afecta en torno al 10% de los adultos con problemas de insomnio de este tipo, así que no es tan raro como parece. Evidentemente, esa persona se dejará llevar a la hora de realizar el acto sexual, junto a otra que, entendemos, sí que estará despierta. Puede ser un problema porque la persona que duerme es capaz de entregarse al placer pero no es consciente de lo que está haciendo.

El encanto de la noche para practicar sexo

La noche siempre ha tenido algo especial que la hace perfecta para ser el momento de pasión del día. La quietud, la calma, el compartir lecho con la otra persona, el roce, la tentación… Todo está mucho más tranquilo, es el momento de mayor intimidad del día para la mayoría de parejas, y por eso también es lógico que sea el momento para dejarnos llevar por la lujuria y la pasión. Además, la oscuridad, la luz de la luna, dan  un toque mucho más especial a la relación.